
Es un proyecto para promover la adaptación del sistema Montado/Dehesa en Portugal y España, cuyo objetivo principal es mitigar las consecuencias del cambio climático, aumentando la sostenibilidad a nivel económico, social y medioambiental.

Demostrar estrategias y tecnologías innovadoras de adaptación al cambio climático para mejorar la calidad y la conservación del suelo y la vegetación en las explotaciones agrícolas privadas y públicas situadas en zonas mediterráneas con riesgo de desertificación.

Aumentar la resiliencia de los bosques del sur de Europa al cambio climático mediante la inclusión de medidas de adaptación en los planes de gestión forestal públicos y privados y desarrollar una referencia técnica para la gestión y la silvicultura.

Medidas para prevenir los incendios forestales, preservar la biodiversidad, aumentar la resiliencia de los bosques, capacitar a los responsables de la toma de decisiones de los beneficios de la prevención e identificar medidas para la adaptación local.

Equipo multidisciplinar de entidades de España, Portugal y Francia identificará y evaluará, durante cuatro años (2018-2022), soluciones para la adaptación al cambio climático de modelos de producción ganadera extensiva en el sur de Europa.

Demostrar la viabilidad de la gestión integrada de los pastos basada en sistemas silvopastorales. Estas importantes zonas, amenazadas, pueden llegar a ser autosuficientes y rentables a partir del uso eficiente de los recursos.